En la actualidad, estamos presenciando una disminución en el uso del efectivo a nivel mundial, ya que estamos avanzando hacia una economía cada vez más digitalizada.
A medida que avanzamos hacia una sociedad cada vez más digital, vemos que la retirada de efectivo se reduce y cada vez hay menos cajeros disponibles. Por otro lado, el número de terminales de punto de venta (TPVs o POS) para realizar pagos con tarjeta o móvil está en aumento. Esto indica claramente una mayor preferencia por los pagos electrónicos frente al uso de efectivo.
En Norteamérica, se prevé que el efectivo represente solo el 5,6% de las transacciones en 2025, mientras que en la región de Asia-Pacífico se espera que sea del 7,7%.
Sin embargo, se prevé que el uso del efectivo siga siendo alto en Medio Oriente y África, con un 31,3%, y en América Latina, con un 23,6%.
Sin duda estamos en medio de una transición donde los pagos digitales y móviles están ganando terreno frente al efectivo, aunque aún queda mucho recorrido, sobre todo en los países emergentes.
¿A quién beneficia la reducción de efectivo?
Entre otros a Mastercard, Visa, Paypal y el ecosistema Fintech.
Si bien es cierto que ahora mismo la lucha por asentar o robar cuota de mercado es importante entre los players financieros anteriormente citados, también hay que tener en cuenta que el pastel a repartir no es estático, sino que sigue aumentando anualmente a doble dígito y aún tiene recorrido, al menos durante los próximos 5 años.
Rodrigo L. Barnes
Consultor de Marketing y Estrategia tecnológica
El blog de rodrigolbarnes.com es una web meramente informativa y en ningún caso supone consejos de inversión. El contenido de esta web y los servicios que se ofrecen no pretenden ser, no son y no pueden considerarse en ningún caso, asesoramiento en materia de inversión ni de ningún otro tipo de asesoramiento financiero, ni pueden servir de base para ningún contrato, compromiso o decisión de ningún tipo. Los datos del blog rodriglbarnes.com pueden estar desactualizados o no ser precisos.